Una cita

El breve espacio que dura la emoción, cae la noche y son las 3 velas llenas de aromas que coquetean con mis sentidos, luces que iluminan la canción que suena a reflexiones de momentos de regocijo para con mi ser, silencios cómplices que acarician mi espalda mientras me recuesto para rodearme de estrellas que diviso desde este pedacito de cielo que he formado llamado hogar, tan mio, tan sencillo, tan yo, éste... que al abrir la puerta me regresa al centro, me recuerda lo sentido en el día y cuán satisfecho estoy con cada respiración y sonrisas que esboce el día de hoy.

Tuve una cita de esas con las que conversas de la vida sin miedos, elucubraciones o tabúes que dibujan un poco mas de fantasías que las propias realidades de un presente, momentos de incomodidad disfrazados, plagados de abanicos de opciones, números contados con matemáticas inversas que provocan resultados controversiales..... pero que mas da!, que sería de la  vida si no aprendo a tomar decisiones radicales, kamikazes o arrebatadas me respondí.

Me senté en el asiento de enfrente, la cabecera.... la mesa es literalmente nueva con un cristal limpio, la miraba con algo de incredulidad, como queriendo cuestionar un poco lo que empezaba a escuchar con atención,  debo confesar que me perdía de tanto en tanto con los contrastes de vela contrapuesta a la noche oscura reflejada en el vidrio, tome varias fotos, pues visualizaba lo que sería tener ese recuerdo, el primero.... juntos, en blanco y negro claro que sí, pues al final se trataba de permanecer presentes sin dejar de sentir lo que estaba pasando, me refiero a mi manía de capturar al menos un momento del espacio compartido sin ser el protagonista principal, gracias a mi renuncia al ego.

Siendo totalmente honesto me encanta escuchar historias, ideas, me limito a contestar cuando la pausa prolongada se hace presente, mientras eso sucede, creo espacios de aire limpio donde procuro dejarlo pasar por mis pulmones, recibir la información y con ello saborear las reflexiones como cuando empece a mirar mas allá de los ojos.....llega la sensación de empezar a conocer el alma, las sensaciones, las expresiones y la forma en la que proyectamos la experiencia que vamos sintiendo.

Ella, tan directa, fulminante a mis sentidos, presentaba un panorama que por segundos me parecían conocidos, sensaciones familiares,  momentos que había presenciado.....estas conmueven... empezó la mente a sacudirse.....hey detente, detente....., se me están desfasando los segundos, has movido el centro de mi eje, los pies tiemblan, me pone contra el rincón y no precisamente de los acusados ....pero si el que me permite mirar al espejo, soltar pretensiones, doblegar los recodos, con humildad reconocer esa silueta que apenas y se divisa pues la luz de las velas son insuficientes para mostrarme el escenario completo.

De una manera asombrosa numeraba cada una de mis experiencias de vida, los lugares que recorrí, las heridas, las alegrías, los momentos compartidos y el lugar que ocupo en el cosmos, con lujo de detalle pudo hacerme sonrojar, avergonzarme.....tener un poco de nostalgia ....orgullo, satisfacción.....paz.......y al final de cada estrofa sonaba como una de las tantas canciones favoritas, las que suelo repetir las veces que sean necesarias para abrazarme antes de dormir o cuado empiezo a soñar....su presencia tenía una luz azul particular de esas de pleyades.

Cuan contundente ha sido su presencia que al terminar la charla, el alma se siente libre, se entrega.. agradezco por el tiempo compartido, la sinceridad en sus relatos, la empatía para saber llegar a la fibra con esas palabras llenas de amor hacia mí, pues comprendí que la intensión de aquel tiempo me lleva  a un propósito mayor.

Antes de marcharse le pregunté su nombre, insistí en volverla a ver..... se volteó, sonrió, con su mano acarició mi mejilla como sabiendo que me doblegaría, cerré los ojos..... escuche un susurro en el oído diciendo.... "soy tu integridad" !