Sin resistencia

Con el tiempo vamos descubriendo estas verdades incómodas que en ocasiones noquean nuestros sentidos de supervivencia, pues empezamos a cuestionarlo todo, vienen acompañadas de miedo e incertidumbre ya que nuestra propia naturaleza humana procurará defenderse y activar todos estos sistemas posibles para evitar un daño mayor a nuestro ser.

Pero hay momentos en que decidimos pausarlo todo, dejar en stand by las cosas con la idea general de que así en quietud nada puede pasar, nada puede lastimarnos y pretender así cuidarnos de forma “consciente” sobre todas aquellas ideas que en nuestra cabeza deambulan dejándonos angustia.

Nos resistimos a los cambios usualmente, abandonar la zona de comodidad absoluta, la que sabemos podemos controlar es nuestra primera opción y con ello todo seguirá igual ….pues permanece intacto no hay espacio a la modificación a la opción adicional de ver y sentir el mundo de manera diferente.

Es ahí cuando descubrí el poder del pensamiento y como se relaciona con lo que hacemos o no, en cada día, cada vez que a mi mente llegan estas ideas o suposiciones de miedo, ansiedad o incomprensión del mundo como tal, respiro…..profundo por que al obsérvalos me doy cuenta el efecto que podrían tener ….como inmediatamente pueden boicotear el día o la vida misma.

Finalmente acepté que al estar rodeado de estos pensamientos que no son solo míos, sino de quienes por alguna razón transitan la vida conmigo, debo aprender a recibirlos de la manera más sutil posible al reconocerme imperfecto, al comprender que cada juicio de valor que alguien hace sobre mí sin fundamentos, no es más que el universo usándolos como canal para limpiar mi alma….me hace sentido este proceso de evolución mediante terceros y todo aquello que pueden interpretar bajo sus propias sombras.

Y así, en este punto tanto el silencio como el no responder de forma abrupta se han vuelto parte de una forma de estar, incomprensible para muchos de momento pues si no hay que argumentar puede llegarse a interpretar hasta como indiferencia, pero al final que más da….soltamos todo aquello que no tiene relación con mi presente, abandono la resistencia a permanecer en ese estado de preguntas y respuestas innecesarias sobre todo lo externo.

Hoy a días de mover el universo entero en mi experiencia humana, tengo millón de sensaciones, es como que algo se activó en mí y me hace sentir la vida desde la tranquilidad y la confianza de que todo va a estar bien, para mí, para mi entorno, siguiendo el orden universal previsto y con la total certeza de que la vida sigue yendo bien.