Sin permiso

Si, es así como llegan las almas a conectar en la vida, cumpliendo con ese acuerdo previsto, no piden permiso solo en un momento se reconocen ya no es necesario hacer nada mas, el tiempo y su ilusión se esfuma.

Se sostienen y encuentran en el bienestar del otro un propósito divino que honrar. Se miran, se distancian, se cruzan y se entre mezclan en historias por las tardes.

No hace falta sorprender, mostrar el lado humano de la apariencia ...es tan familiar su sonido que te invade la confianza de ser y sueltas la carga de pertenecer.

Hay algunas que sin permiso llegan a moverlo todo, a sacudir el mundo y llevarte a volar, susurrándote que lo que tanto anhelamos esta ahí, esperando que nosotros decidamos.... que ya es hora!

Sin permiso, llegas a sentir sus palabras y sientes el cobijo que el alma buscaba, empiezas por ahí siendo parte de algo que aprendes apreciar.

Sin permiso, se quedan aún sin estar a tu lado, pasan por ahí, por esos espacios del tiempo en los que juegas al humano mientras te invitan a sujetarse lo mas duro posible compartiendo el instante mismo.

Sin permiso, acarician tu rostro y en ese instante identificas la luz azul de su alma, la tuya vibra y se estremece, sientes algo que habías esperado por mucho tiempo y que en algún momento lo creíste imposible.

Sin permiso, irrumpe en tus mañanas con un mensaje, una simple excusa para recordarte que aun estas vivo y que tu alma vibra al mismo color que las suyas.

Sin permiso, te dejan en completa libertad de ser lo que quieras ser, no, no existe el tiempo, el pasado y futuro se desvanece de las retinas ....luego te miran a lo lejos y ven tus alas abrir, sabiendo que llego el momento de recordar el acuerdo divino y es eso, lo único que no sabemos que sucederá cuando las reconocemos.