Ser y Parecer
es como usar un calzador
11/4/20243 min read


Estamos llenos de imágenes, colores y sabores, así como una mezcla infinita de personas que van por la vida queriendo ser algo, alguien, eso que denote como nos diferencia del resto, como las clases sociales, el dinero, las jerarquías y todas estas estructuras que hemos venido creando con el pasar de la involución humana y la llamo así porque si fuera evolución otra sería la vida de todos los que vamos transitando este mundo.
Pero la vida es lo que es, lo que se nos presenta y cada quien decide con que veneno quiere vivir, con que cosas reír, que motivos son suficientes para comprometerse, así como para abandonar las ideas, los sueños y hasta la vida per se. Entiendo que cada humano viene con un propósito mayor de vida, de experiencias y aprendizajes, pero me enloquece la manera en la que podemos llegar a ser tan diversos y permitir que nuestros días sean en ocasiones un cúmulo de apariencias y de momentos que sabiendo como evitarlos no tenemos la fortaleza para decir que no.
Leia una frase que decía: "si no te gusta donde estas, muévete, no eres un árbol", y como siempre mi cabeza se dispara y empieza a ver todos los lados, el del abandonar el lugar, así como la fortaleza de querer quedarse como aquel árbol que lo soporta todo, sin opciones, ese árbol que fue creado para sostener...en fin siempre habrá esta dualidad constante a la que nos vemos expuestos y que en muchas metáforas de la vida se presentan a cada segundo.
Ante todo ello, reflexionaba sobre la frase que ha gobernado muchas de mis decisiones de vida, el ser ....y parecer......algo que en ocasiones resulta difícil mantener, en especial cuando nos vemos obligados por necesidad a callar, a soportar o quizás a mantener una postura o lugar por que no queda alguna alternativa adicional, por que tenemos que guardar las apariencias o tan solo por que esa forma "encubierta" de ser temporalmente nos permite conseguir algo o alguien.
Parecer o hacer notar la naturalidad y convicción de lo que proyectamos, hacerle creer a la gente, al universo que somos educados, ricos, pobres, fieles, trabajadores.....es que podemos hacerlo todo, muchas personas nacen con estos dotes escénicos que los llevan muy lejos y mas aun si se suma algo de elocuencia, es esta capacidad de poder convencer a cualquier persona de todo lo que quieren oír, se requiere un tanto de habilidad o quizás algo de astucia para conseguir algo pareciendo ser.
Resumo que esto de ser y parece desde esta perspectiva no única, si no particular, en como usar un calzador para zapatos, los que están ya amarrados y listos para ser "usados" por que no encuentro otra palabra, solo deslizamos por nuestros talones para poder fluir e ingresar a la mente y al supuesto que pretendemos mostrar para pretender ser mientras en el fondo sabemos que no lo somos. Suena a trabalenguas pero cuantas veces estuve ahí, cuantas veces fui quien no soy, cuantas veces pretendí ser alguien abandonándome por la simple idea de estar, sostener o sembrar. Esto que se nos es esquivo cuando el ego y la vanidad hacen equipo con nuestro cuerpo y mente, como queriendo llevar el protagonismo.
El otro lado de la moneda es ser en conciencia y parecer en honestidad, sin pretensiones, sin expectativas solo queriendo calzar en el tiempo en el espacio de un momento, de una historia aquella que escribimos cuando al no tener que demostrar nada a nadie llega a nuestra almohada y nos despierta cada mañana sonriendo frente al espejo, ya que lo que resta por sentir es solo el amanecer que entra por la ventana con colores naranjas, ese olor del café recién hecho a las seis de la mañana.
Que certeza mas absoluta se respira al encontrar el espacio quieto, en silencio, sin ruido externo, dejando que el interior sea el que florezca, sintiendo cada una de las partículas que recorre nuestras venas y nos lleva a conectar con algo que cuesta aceptar del todo pues en esta impermanencia en la que nos desarrollamos, vamos coincidiendo con personas, lugares y momentos que nos empujan a salir de esta zona de paz por motivos que muy pocas veces los llegamos a comprender, mas si a justificar, con esta tarea de experimentar la vida mientras los suspiros se desvanecen, el aire se hace pesado y compartido, menos latidos y varias interpretaciones de los caminos que debemos recorrer.
Seguiré siendo yo en la medida que mi conciencia me lo recuerde, en especial las veces que me quiera abandonar, parecer ya no está en mi léxico por que lo soy!. Con el paso de los años he descubierto que no necesito aparentar, mostrar o ser alguien ajeno a mi para poder pertenecer, ser visto, valorado o cotizado. Sigo creyendo que dentro de esta individualidad compartida que es mi forma de sentir, es el camino mas cercano a ser libre, seguiré descubriéndome mas y mas, encontrando todo este talento invisible para muchos y que ahora se esparce por las paredes del departamento quien me acompaña sin apremio, ni pedirme nada.