Nuevas oportunidades

Muchas de las veces la vida se encarga de ponernos aquí, justo en este momento en el que todo resuena, hay armonía entre lo que sucede y lo que en algún momento solicitamos suceda. Las personas, los lugares y los momentos que se crearon en el imaginario están sucediendo y ya muy poco lo cuestionamos sino, abandonamos la idea de tener una certeza en el momento y solo somos parte del mismo fluyendo con el segundo como grandes espectadores de un espacio VIP

Coincidir era algo que en mi mente anhelaba era como esa sensación de que en algún momento las cosas se calmen, se equilibren y pueda disfrutar de momentos, compañías y todo aquello que hacia sintonía con mi pensar y mi sentir, entendía también que había que poner una pausa a la búsqueda, descubriendo que no hacia sentido insistir en querer tener, poseer o sentir algo que ahora que lo reflexiono no estaba listo para ser apreciado.

Con estas premisas de estos últimos días, he provocado que en mi vida sucedan cosas que quería, es como ir retomando los pasos de donde me quede en un espacio de tiempo donde todo estaba bien, pero en mi afán descontrolado de tener otras experiencias quizás dividí el camino y esa bifurcación me perdí. Ahora es como que los semáforos siempre están en verde, las palabras y la información que son solo señales iluminan un poco mas mi sendero, ese que llevo tiempo recorriendo y que en certeza he podido descubrirlo sin tantas caídas.

Ahora la vida tiene un nuevo camino, o quizás el mismo pero con otras rutas, es como que se han creado otros espacios en los cuales ahora puedo aportar y ser parte de una proceso que puede contribuir a que mi experiencia en este planeta tenga mas colores y mas sonidos que den armonías y música diferente para mis días. Son conocidos a la vez por que es retomar trabajos, experiencias que en su momento contribuyeron enormemente a mi sentir y que ahora regresan para mostrarme nuevos lugares, otros sabores y claro que si mas aprendizaje.

Las charlas son mas profundas, coincido con personas que están en ese proceso de comprender un poco mas de que va la vida, no pretendo tener la verdad pero puedo expresarme de forma libre y espontánea algo que reaviva mi ser y la confianza en sentir que lo que sale de mi boca no pretende ser una verdad absoluta o tratar de convencer, manipular a alguien o la situación, mas bien lleva conmigo esa gratitud por el espacio creado y la información compartida, ese aprecio a cada lagrima derramada frente a mi pero que yo no las he provocado sino ha sido parte de un relato de la vida de esa persona que ahora encuentra refugio en mi compañía.

Es interesante escuchar la vida de otras personas y ver como cada uno sigue este camino que en ocasiones se vuelve inhóspito al ver nuestras expectativas irse por el coladero de la desilusión, de la decepción o el abandono. Pero es mucho mas enriquecedor sentir la tenacidad de ciertas personas para enfrentar su presente, ese que día a día los acorrala entre decisiones y acciones llenas de incertidumbre pero que al final son únicas y en el mejor de los casos guardan la esperanza de un propósito mayor.

El sol sigue saliendo y el agua sigue nutriéndonos de vida, he comprendido que mi acercamiento nuevamente a la naturaleza tiene ese propósito de hacerme sentir mas vivo, el contacto con el silencio y esos momentos de reflexión bajo el agua han sido mi salida, el callar a la mente de los misterios que tengo sin resolver, esos que consumían mis segundos. Regresé es lo que me he dicho, he vuelto a mi centro a ese lugar en donde aprendí a perderme, encontrarme y reformularme la vida, las personas y lo que quiero sentir.

Para mi sentir ahora es un acto diario, distancio del solo pensar los segundos y me apoyo en sentir para poder aceptar todo aquello que no puedo controlar, que se escapa de mis comprensión y claro que si de mi sentir, pero adopto con empatía la buena costumbre de escuchar y estar presente en los momentos de palabras cortas o silencios prolongados de personas que han decido invitarme a sus días y ser parte de su presente. Seguro que la vida me tiene preparado un proceso mas de aprendizaje, algo que hará elevar mis emociones y acelerar los latidos. Acepto el reto, lo recibo con gratitud y con la total seguridad de poder llevar a cabo cada una de esas enseñanzas que están por llegar, abro mis brazos a la abundancia de cariño, de comprensión de apoyo y si en lo económico llega pues es bienvenido a mi hogar.