Los días que no tienen sentido

Hay días que son realmente una lucha constante por respirar y no solo hondo, sino solo respirar, absorbido por las malas noches y la falta de sueño al despertar es como entender que es un día más por batallar, por encontrarle el sentido al día o las actividades que se tienen que hacer para que las horas pasen y algo en ese lapso suceda.

Siento que todo eso que hice burla o deseo hace muchos años que estaría jubilado pasado los 40s se me me hada dado de formas que no las veía venir, es como que no tuve la precaución de planificar mejor esta etapa de la vida y todo lo que hago hoy por hoy me hace pensar en lo terrible que es la jubilación para muchas personas que en lugar de descanso encuentran desolación, ausencia de, o motivación necesaria para hacer de la vida algo diferente.

Buscamos nuevas oportunidades, tenemos la actitud y agradecimiento por la vida por lo que tenemos, poco o mucho, lo hacemos aunque pueda parecer que no, en ocasiones cuando estamos en ese letargo infinito de no poder decidir o actuar de forma contraria a nuestro estado de ánimo.

Escucho podcast para poder entender como funciona el cerebro, y todo lo que ello conlleva para poder llenarme de herramientas útiles que me permitan comprender un poquito mas de que va todo este estado en el que me encuentro, leo informes, reportes y encuentro una misma verdad es decir, todo lo que leo esta en sintonía, está expuesto ahí, pero tener la información no es suficiente, por que hay días como estos, o como otros similares en que por mas detalles que estén presentes no hacen sentido para encontrarle la vuelta a toda la incomprensión que llevo dentro.

Estamos a la víspera de navidad donde todo por unos días es amor y paz, donde todos están en reuniones, expresando su amor y compartiendo cenas, eventos, regalos y todo aquello que llena los espacios en las redes sociales para mostrarnos al mundo lo afortunados que son al vivir semejantes momentos. Todos se esfuerzan por hacernos saber como viven sus días, las cosas que les están haciendo vibrar alto, y todo ello esta bien, es perfecto, recuerdo yo hacer lo mismo varios años atrás con otro nivel de conciencia y en otra vibra. El tema es que en ocasiones todo esto lo que hace es generar comparación y en mentes frágiles o corazones rotos tiene un efecto demoledor, por que cuestionamos nuestro presente de forma implacable y sin misericordia somos duros con nosotros mismos sin poder al menos escucharnos nuevamente lo que acabamos de recriminarnos.

Estas etapas de la vida, no son fáciles de digerir y uno busca el aislamiento por que en realidad no sentimos la capacidad de compartir con otras personas a su nivel de alegría o algarabía por las fiestas, no tenemos la motivación necesaria y a veces ni el dinero suficiente para poder hacer de estas fiestas un motivo de celebración, rencuentro o convivencia desde el amor. Siempre he cuestionado estas fechas quizás traigo conmigo muchos traumas de mi niñez o adolescencia y al crecer mi hija fue como que me quedé sin esa motivación de celebrar estas fechas, principalmente por que lo festeja siempre con su mamá y esto ha hecho que con el pasar de los años mi sentir vaya extinguiéndose.

Debo reconocer que mi mayor problema es la ansiedad, esta que me sigue y me vista a diario y yo digo, al menos ella no desiste y siempre esta presente en tu día a día, no te abandona, esta ahí cuando nadie mas, cuando el resto se aburre y abandona con facilidad tu desinterés. Hago la pausa respectiva, bebo un sorbo de café, uno que me recomendaron pero que no me acaba de gustar, pero lo hago por que no desperdicio nada, y así sigo la vida en 4 columnas y dos grandes ventanales viendo la vida pasar, sin sentir lo minutos y esperando una vez que mas algo cambie.

Encuentro con quien conversar de tanto en tanto, pero no pasa de un whatsapp por que el mundo actual esta diseñado para eso, para ser compañeros digitales, y tanto es así que cuando nos vemos personalmente estamos pendientes del celular y queriendo incluso en ese instante compartir con el mundo lo que estamos haciendo, no como antes, que tomábamos la foto para congelar el recuerdo y guardarlo para volver a sentirlo en un tiempo posterior.

Días que no hacen sentido son comunes en mi vivir, vivo en una montaña rusa de emociones que buscan estabilidad sin poder encontrarla, pienso, siento y actúo de tanto en tanto haciendo de mis días una rutina que a veces se rompe por que con intensión me invito hacer cosas diferentes, hago a veces cosas que no me gustan pero por necesidad, por matar el tiempo, por quejarme de algo mas como el tráfico por ejemplo, pero en el fondo pierdo el sentido del disfrute.

Estoy tratando de recordar en que momentos o con que lugares o personas realmente puedo desenchufarme de esta realidad tirana, sé que una buena compañía, una buen charla y hacerme pensar mas allá de mi presente cambia todo mi chip, me pone en otro mood, sin embargo en el fondo me siento a veces usado porque es un te busco para algo en particular, a mi tiempo, a mi interés y al sentir que no hay reciprocidad me retiro lentamente, con un par de indirectas, con un par de avisos, dando 3 o 4 oportunidades de conocerme bien y saber que es lo que pienso, siento y quiero inclusive en una amistad, porque en realidad me cansé de estar ahí para todos siempre que me necesitaban, una vez mi madre me dijo que soy egoísta por que ya no estoy para mi familia como antes, presente, buscaba las razones para poder comprender que paso, y no hay otra conclusión que el cansancio emocional que llevo, es como estar harto de todo, y no es que busque quien venga a salvarme pero si me vendría bien una mano incondicional que me pueda apoyar en decisiones y conozca esta parte de mi que me ayude a cruzar esta crisis existencial que aun mantengo sin recriminarme ni presionarme por salir de inmediato.

No me estoy victimizando, mi intensión no es que alguien sienta pena o angustia, por eso estos temas no se los puede tratar o hablar con cualquier persona, es que hay una línea delgada entre que te ayuden y se hagan parte del problema desde su inconciencia y puro afán de ayudarte, muchas personas no tienen a la mano las herramientas necesarias para poder comprender que ayuda a veces es simplemente escuchar, no ser parte de, sino solo acompañar.

Escuchar algo que es tan esquivo para muchos ya que estamos ensimismados  de manera tal que no terminamos de ver que la vida va mucho mas allá de nuestro ser. Escuchamos lo que queremos nada mas, decimos lo que pensamos sin meditar, sin analizar, sin empatía por el resto de personas. Que importante es en días como hoy, en lo que pierdo la lucidez de la vida tomar este tiempo de escribir para poder comprender un poco más de mí y de este estado temporal para que con el pasar de los días pueda volver a sentirme mas vivo, un poco mas que hoy quizás, pero vivo en plenitud.