El día en que recibes lo que has dado!

Es increíble como la vida misma se encarga en devolverte todo lo que has dado en tu transitar y ahí la pregunta que cada uno de nosotros nos hacemos es.....¡qué hemos dejado en nuestro paso por la vida de los demás? eso nos hará preocuparnos o quizás tener cierta expectativa positiva de que en algún momento esto llegase a nosotros usualmente sin previo aviso.

Creo que lo más mágico es eso, que llegue en el momento menos indicado y en muchas ocasiones de las personas que no esperamos, mientras lo vamos sintiendo y viviendo a la mente y corazón nos llegan los recuerdos de haber sido así en su momento y ya no pensamos que fue la persona (s) equivocada si no que así tenia que ser, pero paradójicamente al recibirlo en un segundo nos cuestionamos, estoy haciendo yo lo mismo? estoy correspondiendo desde el amor, la afectividad lo que estoy en ese instante recibiendo?

No queremos ser parte de ese pasado insatisfecho y no tiene nada que ver con fingir o ser hipócritas, si no mas bien desde la conciencia propia del ser dejarse llevar, ser libres de sentir y cada uno de esos momentos, detalles o circunstancias sentirlas a plenitud solo siendo uno mismo, dando lo mejor que tenemos que es el tiempo de calidad y sabiendo que somos libres de serlo.

Recuerdo haber pasado por esta etapa mas de una vez en mi vida, pero a mis 44 es como que las cosas tienen un color y sabor diferente cuando de la nada, recibes esa caricia, esa palabra o hasta la cucharita menos pensada a la hora de dormir. Sentir realmente que todo el universo confabula para que sientas amor es realmente gratificante, nos dibuja la sonrisa en el rostro y sobre todo nos abre el abanico a las infinitas posibilidades de vivir y sentir, de entregarte al momento y sentir que estas coronando la punta de una montaña de rocas.

Que importante es saber aprovechar el momento, el saber actuar a tiempo, es decir, liberarse de prejuicios y miedos que nos detienen en el tiempo en especial sabiendo que éste pasa tan deprisa muchas veces, los momentos son eso, efímeros de por si, y es ahí cuando se debe encontrar la determinación de sentirse vivos, de volver a dar y recibir por que la vida, el amor también parte de ello.

Tengamos la apertura y conciencia de obrar en amor, de que cada uno de los pasos que damos en esta vida vayan acompañados de este sentir, quizás esto sea el inicio de empezar a vivir en plenitud, ya hemos escuchado del karma y del Darma, pues que mejor momento para concientizar aquello y dejar que los buenos sentimientos y las acciones empáticas sean parte de nuestra esencia.