De repente

Vuelve a suceder

9/6/20231 min read

Como por casualidad o causalidad llegas a ser parte de una nueva idea, de un nuevo sentir, comprendes que la vida tiene muchos significados y empiezas a crear.

Rompes ese ayer que atormenta las entrañas y empiezas a soñar, a descubrir que los colores del cielo al despertar son como mágicos y aun que prefieres quedarte contemplando sabes que debes levantarte, respirar y sentir que un día mas a llegado.

De repente, las palabras fluyen y te vuelves imparable, contemplas los girasoles y las arrugas de la cama mal tendida, pero no importa nada el café de la mañana sabe mejor que ayer.

Recibes un texto con palabras que se leen sinceras y llenas de miedo de haberlas dicho, pero que inyectan la azúcar que hace saborear mejor la fruta que acabas de comer.

Te sientas en el computador y las horas pasan sin prisa ya no te importa que el segundo no haya terminado pues has sentido que podías descubrir la risa en el espejo.

De repente, sientes ganas de abrazar, te abrazas tan fuerte que arrugas la camisa blanca que te la has planchado con perfección y al mirarla solo quedan las ganas de volverlo hacer.

El teléfono no suena constantemente, básicamente es para recordarte que estas aquí en total introspección, disfrutando de ti de ese espacio que has podido crear con lagrimas, risas, melancolías y propósitos.

De repente, sientes hambre y no te da pena comer, tu cuerpo, tu templo lo saben, te has permitido reconocerte, amarte y complacerte.

Usas lentes, tienes canas, arrugas y cientos de perfectas marcas en todo tu cuerpo que solo te recuerdan lo mucho que has amado, sentido y evolucionado.

De repente, duermes y disfrutas de esas sabanas recién lavadas con olor a ti, a tu historia, a tu libro ......

De repente, solo sigues escribiendo todos los capítulos fragmentados de la memoria procurando que de repente tengas algo mas que contar.