Cuentos que no son cuentos

Hay días que podemos recibir tanta información que tenemos el derecho de abrumarnos o de cuestionarlo todo, de dudar, de creer, de soltar y recomponer las piezas del rompecabezas mental que se fractura con cada una de esos cuentos que parecen que lo son por lo inverosímiles o por que quizás no conocemos del todo al autor de esas historias maravillosas de pasado y presente conjugados de la nada, como en una sesión de terapia donde solo resta escuchar, aportar y de a poco abandonar las pretensiones de profundizar en esos espacios donde la copa esta rebosante.

El universo tiene estas formas místicas de poner frente mio determinada información para confundirme, para retarme o hasta para probar de que soy capaz, ha estas altura de mi experiencia humana y sobre todo.... como responder o callar ante lo que puede o no ser una verdad contada por la mitad, en partes o a intereses particulares....que los justifico pues total, cada quien es dueño de decidir hasta que o a quien le cree o no.

Me gusta esta idea de callar, de actuar únicamente lo necesario, de no juzgar y entender como cada quien nada a su ritmo en este océano de emociones, ver como al descubierto cada quien deja salir a la luz los lados mas grises, turquesas y tornasoles de su espiritualidad, religión, creencias y aspectos que de una u otra forma marcan un precedente para saber hasta donde llegar, eso que al recibir la intuición altera, avisa y deja que nuestro mejor amigo el libre albedrío empiece a jugar con nosotros a ver que resultado tenemos de todas estas interpretaciones que hacemos.

Que difícil me resulta poder comprender las intensiones de las personas, el por que se acercan o por que quieren que sea parte de sus días, hay algunas almas que si, fluyen dentro de mi día a día, sin permiso, sin un antes o después, solo la mera presencia de estar ahí cuando quieren, como quieren por contarnos un poquito de como van los latidos, las respiraciones o el hambre que no sacia nuestras ganas de algo mas.

Creer en la palabra del primer acto, es una de las virtudes que llevo conmigo, hace rato que me cansé de cuestionar si lo que dicen es cierto o no, que el privilegio de la duda sea el mayor fan de esas personas y yo con ello dejo que el tiempo y el universo en su infinita bondad para conmigo me permita ver y sentir dicha verdad. 

Hoy escuché como alguien puede llegar a definirse como humano, describirse desde varios aspectos de su individualidad, esa certeza de saber que es lo que quiere y a donde va, aun que en teoría no buscaba nada, pero hacía sin reconocerlo en conciencia todo lo contrario; desde mi sentir el mensaje llegaba como que quisiera o está trabajando en ser eso, a manera de proyección de atracción, por que muchas afirmaciones sonaban a esperanza, anhelo y a ratos hasta como una idealización de ser esa persona.

En estos momentos de vida, de reflexión siento que hay que ser coherentes con el universo, ser lo que queremos recibir: quieres verdad..... se verdad, quieres fidelidad.... se genuino y mas allá de esta falsa pretensión que nos hacemos de merecimiento, comprender que si bien es cierto el bien común y bienestar.. esta aquí solo por le hecho de haber despertado, hay algo mas esperando en algún rincón...para enseñarnos que la vida es un instante nada mas, que ese hoy del que decimos estamos complacidos aún lleva algo vacío cuando las pretensiones en cada acto que hacemos se manifiestan en el resumen de lo obtenido por dicho acto per se.

Quizá mas dudas que certezas antes lo nuevo, lo desconocido y esta manera perfecta que tiene la vida de darme información, es solo eso, información que vienen de humanos que comparten el mismo aire y que de alguna u otra manera, quieren quedarse o entrar en otros casos a este espacio tan reducido pero a su vez tan amplio de cariño e interés verdadero que quiero pensar se siente cuando mi presencia acompaña el segundo en el que compartimos vida.

Abro el espacio para volver a creer en las buenas intensiones del universo, de los humanos que hoy cruzan la calle en semáforo verde, por quienes aun tienen la cobardía de hablar, de preguntar y de solo dejar que las causalidades nos permitan ser parte de, respetando su proceso y confiando que hay algo mas, mas allá de lo que puedo hoy por hoy sentir, que este interés manifestado como migas de ajonjolí sea solo eso, una simple curiosidad de saber, por que al final del cuento que no es un cuento podemos hacernos la vida de los colores que se nos venga en gana sin derecho a cambiar el rumbo de la mía..... por que esa al final de cada respiro consciente que doy, se que va bien!