A que costo?
Tras cada decisión, cada elección
10/7/20254 min read


Vivimos en este constante intercambio de cosas, tiempo, momentos, sensaciones que de una u otra manera hacen que todo tenga un: costo, beneficio, ganancia o pérdida, vamos a llegar a esa conclusión usualmente cuando ya todo ha pasado y por ahí encontramos el espacio para la reflexión sobre lo que hemos pasado.
La vida misma nos permite elegir constantemente que es lo que queremos para nuestro día a día....pero pese a ello lo que solemos sopesar es lo que queremos para el futuro, ese mañana que aun no se produce pero con el que soñamos y en base a ello nos dejamos llevar por ese supuesto consentido de que sucederá, basta con pensarlo, sentirlo, visualizarlo, esta materialización que se llama a travez de la intensión. Todo ello es suficiente para que impulsivamente o quizas llenos de ilusión tomemos decisiones sin evaluar detenidamente cual es el precio que debemos pagar para que eso llegue a nuestra vida.
Muchas personas no tienen opciones y simplemente optan por lo que la vida les entrega, no quiero pensar que se conforman pero las condiciones del ambiente en el que se desarrollan no entrega mas información que esa, de manera tal que su vida se vuele lineal, una sola forma de ver, vivir y sentir, trabajar, comer, dormir, sacrificarse por los suyos, ahorrar en el mejor de los casos y desear una vejez lo menos enfermos posibles para morir con dignidad.
Estos testimonios de vida los he escuchado continuamente en generaciones anteriores a la mía, donde y cuando la vida era diferente. Hoy ya no puedo diferenciar si era mejor o peor, por que como todo se transforma los problemas y las exigencias siguen existiendo solo que tienen nuevos matices con los mismos protagonistas, la raza humana.
El único patrón que de momento identifico se repite es habernos saltado un par de preguntas antes o durante la toma de decisiones. Preguntas como: Quién soy?, Que Quiero?, Que hace estremecer mis sentidos?. Aun que suene un poco místico...hiposo...o fuera de sitio.... las amplias respuestas que hay tras esas preguntas pueden ser una guía para darle un sentido de pertenencia y permanencia a esta experiencia humana, es darse esos segundos, horas, años el tiempo que sea necesario y las veces que sean necesarios para constantemente tener esa charla sincera que derrumbe las apariencias, comparaciones y suposiciones de lo que debemos o deberíamos ser en cada una de las etapas de la vida.
Los niveles de conciencia o de reflexión como los llamo, siempre están ahí, disponibles todo el tiempo para ser usados por nuestra mente, si tan solo olvidamos la estructura, lo que se supone es...y abrimos el espacio para comprender un poco mas sobre ideas...e información diferente a lo que nos da seguridad y comodidad.....nos permitiría descubrir un mundo adicional de posibilidades de mejora, cambio o simplemente de existencia per se.
Me tomó tiempo darme cuenta del precio que había por no leer las letras pequeñas del contrato al que me estaba sometiendo, deje que mi ego, vanidad y superficialidad tomen protagonismo y sean ellos quienes decidan en mayoría conmigo, doblegando mi integridad y la forma consciente de ser y existir bajo unos parámetros de vida que habían coloreado mis paredes. El miedo, el terminar con mis negocios , encontrarme vulnerable ante el consumo y la necesidad de proveer dieron paso a que ceda durante un tiempo a la estructura siendo parte activa.
He sido acusado, incriminado y cuestionado constantemente por andar de aquí, allá, por quedarme inmóvil, por convertirme en una persona impredecible por la constante forma que tengo de moverme entre las olas. Mantengo una teoría que no pretende hacerme sentir superior o vulnerable, ninguna de las dos polaridades, pero si hay algo que gobierna mis decisiones es la certeza de tomar una decisión pensando en mi bienestar mental, anímico, sobre todo lo demás que coexiste en el planeta.
He pagado precios altos, bajos, he tenido cosas gratis, me han robado, me ha pasado de todo en este camino, que maravilla!!!. He podido experimentar todas esas sensaciones y emociones que solo la experiencia humana nos permite tener. Es muy posible que sigan pasando esas situaciones, esos momentos....en conciencia los recibo de la manera que tenga que ser......tengo presente que ahora cuento con una herramienta que me recuerda lo acelerado que soy, lo atrevido que puedo llegar a ser.....para luego....retomar el sentido y conservar la calma, llenarme de paciencia y esperanza para no hacer las cosas por urgencia, por necesidad o sin un propósito que se encuadre con un bienestar común.
El intercambio es bienvenido, pues es parte de nuestro ADN, de lo que hemos llegado a experimentar, la reciprocidad es una bendición del universo para esos actos de bondad y resiliencia que aplicamos a nosotros, nuestro entorno o nuestra sociedad. Si vamos a tener que pagar un precio por algo, que sea conscientemente, con decisiones o acciones tomadas en amor, en respeto, en gratitud a todo lo que se nos permite sentir, ver, oler, tocar.
Si el amor hacia el todo toma las riendas de nuestras decisiones y la conciencia interior la apoya, la sustenta......el costo no será mas que una ecuación matemática donde todos ganan, donde quedarán impregnados recuerdos, momentos y sensaciones que estremecieron el cuerpo, mente y alma de quienes lo vivieron. Este es el camino que elijo para mi, para con quienes quieran compartir un segundo de vida a mi lado, esta es la decisión que marca lo que es hoy....y todo aquello que este destinado a llegar, por que simplemente......la vida sigue yendo bien!